Ayer a la salida de la última reunión con los responsables del equipo de gobierno mostraron con claridad su decisión de no reunirse hasta que sus peticiones sean respondidas por escrito.

Ayer a la salida de la última reunión con los responsables del equipo de gobierno mostraron con claridad su decisión de no reunirse hasta que sus peticiones sean respondidas por escrito.

En una noticia recogida hace unas semanas ya informábamos de la "sordera" de los representantes del equipo de gobierno ante las peticiones de Irungo Harrera Sarea. Según la red que lleva ya más de siete meses ayudando y acompañando a las personas migrantes que llegan a Irun "en todo este tiempo se han dado pasos para mejorar su situación", sin embargo, siguen "detectando importantes carencias". Por todo ello, han solicitado al Ayuntamiento de Irun mediante un escrito que "actúe para solucionar" lo que para la red son puntos importante, como la señalización de Martindozenea y el recorrido hasta allí, la cesión de un local a Harrera Sarea para continuar realizando su labor, que con mal tiempo se les permita estar en los arkupes del ayuntamiento, una solución a las personas que están en situación de calle; a las que han pedido asilo y a las que no reúnen los requisitos exigidos para tener acceso a los dispositivos que actualmente existen y que se recojan y se nos entreguen las actas de las reuniones con el propio ayuntamiento.

Además han solicitado que igual que "al igual que se le han entregado estas peticiones al Ayuntamiento por escrito, se nos den también las respuestas a los asuntos requeridos por escrito".

Ante la "sordera" institucional Irungo Harrera Sarea no volverá ha reunirse con responsables municipales hasta que estas peticiones no sean contestadas por escrito.

A pesar de lo que se publicite, la transparencia de el equipo de gobierno y sus responsables tanto políticos como técnicos en estos y otros muchos casos relacionados con colectivos sociales es la de no facilitar nada que deje constancia escrita, en especial es el departamento de Bienestar Social, como bien conocen colectivos como STOP Desahucios.