El 30 de septiembre los pensionistas reivindicarán en Irun que "los derechos no se pierden con el envejecimiento"

Momento de manifestacione del  Movimiento Pensionistas Txingudi

Aprovechando que el 1 de octubre es el Día Internacional de las Personas Mayores, la Plataforma de Pensionistas de Txingudi ha convocado una manifestación el próximo lunes, 30 de septiembre, desde la plaza San Juan de Irun. Como el futuro de las pensiones está en juego, han hecho un llamamiento para que jóvenes, estudiantes, sindicatos y colectivos feministas se sumen a la manifestación.

Desde 2018 se ha movilizado todos los lunes la Plataforma de Pensionistas de Txingudi. A pesar de haber reunido fuerzas con otros colectivos de Euskal Herria y del Estado, y de haber llevado a cabo numerosas actividades, hasta el momento poco han conseguido. Desde la plataforma tienen claro que las autoridades gestionan las pensiones públicas en el marco de la lógica capitalista. Y que llevan a cabo todas las reformas con el objetivo de moderar el gasto en pensiones. "Hay dinero para garantizar una pensión mínima digna, pero el criterio que viene de Europa es moderar el gasto en pensiones", dicen los miembros de la plataforma.

En este sentido, mientras no se dé un cambio de paradigma, entendiendo que el sistema público que garantice los derechos de las personas mayores está amenazado, las reivindicaciones de las pensiones públicas iniciales han pasado a exigir también durante estos años demandas vinculadas al resto de problemas de las personas mayores. Por ello, el próximo lunes se volverá a reclamar un sistema público digno de atención a la dependencia, reforzar la red pública de residencias de personas mayores y no mercantilizar el cuidado de las personas mayores, acabar con la brecha de género en las pensiones y, en especial, una pensión mínima de 1.080 euros. "Queremos reivindicar que los derechos no se pierden a medida que vamos envejeciendo", aclaran.

La plataforma tiene claro que debería ser de 1.200 euros, ya que en siete años la petición inicial de 1.080 euros se ha quedado corta. Pero a pesar de las reformas, recuerdan que el Gobierno Vasco está intentando negociar con el Gobierno español para conseguir la competencia del sistema de pensiones, y ahora que las cosas se están moviendo, tienen claro que toda reforma y cambio, "más que en favor de los pensionistas, siempre tienen el objetivo de reducir las pensiones, siempre deciden a la baja".

Por eso, los y las pensionistas ven ahora más que nunca la necesidad de movilizar al conjunto de la sociedad. La manifestación del próximo lunes partirá de la plaza San Juan de Irun a las 12:00 horas y contará con la participación de colectivos feministas, jóvenes, estudiantes y sindicatos. Aunque sea un problema de todos, porque les está costando mucho reunir a los jóvenes a la pelea. Y como advierten, "las pensiones del futuro son las que están luchando ahora". Los y las pensionistas de Txingudi creen que lo del lunes puede ser un hito.

Movilizaciones también en Iparralde

Por otro lado, Ipar Euskal Herria ha llamado a la huelga el primero de octubre contra la reforma de las retretas. Si desde toda Francia se ha extendido el llamamiento a la huelga, en Baiona también hay varios sindicatos llamados a secundarla. Entre ellos, sindicatos de CGT, FSU, LAB, Solidaires y Liceos. Los sindicatos creen que es un buen momento aprovechando que en octubre se hablará en asamblea nacional del presupuesto estatal y de Seguridad Social.

La cita será el primero de octubre en la plaza Santa Úrsula de Baiona a las 10:30 de la mañana.

Publicado originalmente en euskera en antxetamedia.eus.

1º de octubre de 2024: Día Internacional de las Personas Mayores. Los derechos no caducan con la edad

MPEH Las personas mayores tenemos derecho a acceder a unas condiciones de vida dignas a unas pensiones públicas suficientes, servicios públicos universales y vivienda saludable. Queremos decidir cómo queremos vivir, cómo queremos ser cuidadas cuando no podamos hacerlo por nosotras mismas, y cómo queremos morir.

En Euskal Herria existe una profunda preocupación por la situación que viven las personas mayores más frágiles, muchas de ellas usuarias de centros asistenciales y de servicio de ayuda a domicilio, por la insuficiencia de pensiones mínimas miserables y por los recortes, la privatización y el encarecimiento de servicios públicos esenciales.

Las asociaciones de familiares de residentes de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, junto con el Movimiento de Pensionistas denunciamos que la realidad del colectivo de personas mayores en Euskal Herria dista mucho de los discursos autosuficientes de DDFF y Gobierno:

La aplicación de la legislación vigente y los recortes de los últimos años no cubren la demanda social de servicios, ni las necesidades de las personas usuarias ni de las trabajadoras.

El sector sociosanitario es un sector feminizado, la mayoría son mujeres, con unas condiciones precarias e indignas.

Los afanes privatizadores y economicistas de las distintas administraciones, han derivado en un modelo de negocio y lucro, basado en criterios mercantiles que buscan la rentabilidad económica.

Denunciamos la falta de coordinación sociosanitaria y exigimos la obligatoriedad de unidades sociogeriátricas y sociosanitarias en los centros residenciales. Solicitamos un modelo de calidad con criterios claros de proceso y resultados, así como planes de atención individualizados, que sean de obligado cumplimiento, no recomendaciones.

Exigimos a las Administraciones que dejen de mirar hacia otro lado, y que a través del diálogo y la participación de los agentes sociales se abran a repensar un modelo de cuidados público universal, cercano, digno y de calidad.

Exigimos pensiones públicas dignas justas y suficientes que permita a las personas acceder a unas condiciones de vida dignas.

Por estas razones el día 30 de septiembre salimos a la calle en las cuatro capitales y muchos pueblos de Euskal Herria. Y así lo seguiremos haciendo hasta conseguir nuestros objetivos.

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