Plataforma Ciudadana Osasun Bidasoa.- La situación de la atención primaria en Irún es crítica y requiere soluciones inmediatas. La reciente propuesta del Consejero de Salud del Gobierno Vasco, ha causado una gran preocupación ciudadana.
Condicionar la construcción del tercer centro de salud en Oinaurre a la cesión de terrenos adyacentes al Ayuntamiento de Irún para construir un “Gran Ambulatorio” en el centro de la ciudad, consideramos que solo contribuye a crear confusión y a retrasar la solución al problema de la falta de espacios dignos para la atención primaria de salud en Irun.
OSASUN BIDASOA reclama la inmediata puesta en marcha del proceso de construcción del tercer centro de salud en Oinaurre. También hemos trasladado al Departamento de Salud la necesidad de la ampliación del Hospital Comarcal mediante la construcción de un edificio anexo. Consideramos que condicionar estas obras a la cesión por parte del Ayuntamiento de un solar destinado actualmente a la ampliación de las dependencias municipales, solo supone empeorar la situación actual y retrasar la solución al problema de falta de espacio para la atención sanitaria en el Bidasoa y Bortziriak.
Irún es una ciudad de estructura lineal sin un centro claramente definido. Cerrar el actual ambulatorio de Irun Centro, para trasladarlo a un edificio adyacente al Ayuntamiento (y cercano al centro de salud de Dumboa), implicaría alejar a los ciudadanos residentes en los barrios de Anaka, Anzaran, San Miguel y Pio XII, de la atención sanitaria, empeorando su accesibilidad.
OSASUN BIDASOA propone que Irun disponga de 3 ambulatorios: Oinaurre (de nueva construcción), Irun Centro (ampliado en 1500 metros en la parte trasera) y Dumboa (habilitando los espacios actualmente ocupados por profesionales de salud pública). Hay que dimensionarlos convenientemente para que tengan capacidad de resolver los máximos problemas de salud, evitando desplazamientos innecesarios al Hospital Comarcal.
Proponer soluciones imposibles, desde el desconocimiento de la realidad comarcal, y sin haberlas negociado previamente con la corporación municipal de quien depende el Plan General de Ordenación Urbana, solo nos causa estupor y una profunda preocupación.