Si se puede Irun.- Hace dos días conocíamos la noticia de la puesta en marcha del protocolo de alojamiento de personas sin hogar.
 
El ayuntamiento ofrece una habitación en pensión a todas aquellas personas sin lugar donde cobijarse.

Pero, y aquí viene lo vergonzoso: esta garantía mínima se da solo al bajar la temperatura a 8ºC, de acuerdo a Euskalmet. Teniendo en cuenta que el Decreto 185/2015, de 6 de octubre, de cartera de servicios y prestaciones sociales del Gobierno Vasco, afirma que debe ofrecerse un servicio “con carácter permanente, todas las noches del año”, establecer condiciones sujetas a la temperatura es dramático y no ajustado a derecho. No es aceptable.
 
Aunque esta irresponsabilidad no acaba aquí. El protocolo del ayuntamiento afirma que las personas sin hogar deberán solicitar el alojamiento personalmente en la comisaría municipal.
 
¿Quién puede pensar que personas en situación de exclusión social, de vulnerabilidad, van a acudir a una comisaría a solicitar una prestación?, ¿Es que ningún responsable ha entendido que esta medida roza la criminalización de la pobreza?, ¿Nadie ha valorado el perjuicio en la dignidad de estas personas?.
 
No es serio. Son ya años solicitando desde muchas instancias un espacio para la pernocta de las personas sin hogar, y ha tenido que ser ahora, años después, cuando se anuncie que se hará un estudio... ¿ahora?, ¿un estudio?.. Ya hay trabajos realizados por el SiiS*, cuestionarios sociodemográficos en Irun; gastar dinero en ello es un despilfarro. El equipo de gobierno aún no ha entendido el estado de emergencia social que vienen padeciendo muchas familias.
 
Pedimos una apuesta real y definitiva por una sala de noche en Irun, que apoye a las personas y familias en exclusión residencial, en proceso de desahucio o ejecución hipotecaría o en situación de vulnerabilidad social.
 
¡ES UNA PRESTACIÓN BÁSICA¡