Un año más, decenas de personas se congregaron en Mosku para recordar a los represaliados políticos irundarras en el día de inicio de fiestas. Irundarras que mediante la quema de una cárcel de cartón quieren acabar con el sufrimiento que padecen sus vecinos presos y familiares.

El ttakun de la txalaparta dio comienzo al acto. Una joven, a pesar de que no funcionaba la megafonía, consiguió trasladar a los asistentes que, este año, las llamas de la hoguera también querían acabar con la represión que esta sufriendo Irun con el decomiso de Hazia, el juicio a un joven irundarra en la audiencia nacional, la ilegalización de Askapena,...

A continuación fue el turno de l@s dantzaris que bailaron en torno a la hoguera tras el pertinente aurresku ante los familiares de los presos.

Y llegó la hora de darle fuego a la prisión. Uno de los organizadores prendió la hoguera mientras que los asistentes coreaban "presoak kalera amnistia osoa". Antes de que los txalapartaris hubieran finalizado su segunda intervención, la cárcel ya había sido pasto de las llamas. L@s que querían saltar por encima, tuvieron que esperar hasta que el fuego hubo consumido algo más el resto de la hoguera en la noche más corta del año.