Irungo EH Bildu.- En Irun según los últimos datos de Lanbide, en este momento hay 5214 personas que quieren y no pueden trabajar. Irun es con una tasa de paro del 17,5% la ciudad con mayor tasa de paro de Gipuzkoa (13,3%).

Este dato nos demuestra, que la lucha de la clase trabajadora sigue siendo hoy más que nunca, necesaria para combatir al capital, y sobre todo al sistema que lo privilegia.

Un sistema del que forman parte, el PP, el PSOE, PNV y UPN, y que fomenta la injusticia y las diferencias sociales, regulando a favor, entre otros, de los bancos y de las grandes empresas.

Un claro ejemplo es el caso de las mutuas, que no son más que empresas privadas a las que cada vez se les otorga mayores cuotas de negocio a costa de la expropiación de competencias propias del sistema público de salud. Uno de los últimos casos es el de la ley que entró en vigor el pasado 1 de Enero, que otorga a las mutuas facultades de control en materia de contingencias comunes. Este hecho ha provocado que cuestiones que hasta ahora eran competencia exclusiva de la sanidad pública pasen a manos privadas, pudiendo además facturar a Osakidetza, por ciertas cuestiones.

Debemos tener cuidado con estos movimientos de privatización, incluso cuando supongan la privatización de competencias que no tienen repercusión económica, porque son pequeños movimientos, que se hacen con sigilo, pero que tienen consecuencias en el bienestar social, ya que suponen pequeños y silenciosos pasos en la progresiva privatización de la sanidad.

Es necesario que los trabajadores y trabajadoras de este país adquiramos conciencia sobre la forma de actuar del sistema que privilegia al capital, y que entre todos y todas creemos un nuevo sistema social; un sistema en el que sea imposible que unos amontonen millones mientras otros se degradan y caen en la miseria.

Pero para ello hace falta gente honrada. Gente que lejos de ansias de dinero y de poder, esté dispuesta a desarrollar una política alternativa. En este nuevo sistema político, solo tienen cabida las personas que están dispuestas a escuchar, sentir y dar solución al hartazgo del pueblo; no hay sitio para la gente que hace política respondiendo a intereses de redes clientelares, ni para corruptos.

El objetivo es crear un sistema político justo, basado en la participación, y que de respuesta a las necesidades sociales. Pero para ello es necesario tejer una compleja red social, que permita tener en cuenta todas las sensibilidades sociales.

Y en ese sentido, queremos aprovechar una fecha tan simbólica como la del 1º de Mayo, para decir, que vamos a iniciar una ronda con los representantes de los trabajadores y trabajadoras de diferentes empresas de Irun, para abrir canales permanentes de comunicación, mediante los cuales, poder conocer en cada momento cual es la situación, el sentir, las demandas y necesidades de los trabajadores y trabajadoras de este pueblo.

Por último añadir, que no quisiéramos terminar esta intervención sin dedicar en una fecha tan importante como la del 1º de Mayo, un recuerdo a todos aquellos trabajadores y trabajadoras que han perdido la vida en un accidente laboral o por efecto de una enfermedad profesional, así como a los que sufren graves secuelas.