Irungo EH Bildu.- El pasado mes de Mayo, desde Irungo EH BILDU mostramos nuestra preocupación por la situación laboral del personal que realiza los diferentes trabajos de de atención a los y las usuarias del centro cultural CBA. Para esas fechas el ayuntamiento había puesto en marcha el proceso de licitación para la subcontratación del servicio para los próximos dos años dado que el actual periodo espiraba.

Una vez llevado a cabo dicho proceso, la empresa que resulto elegida declinó la proposición del ayuntamiento.  Se le ofreció la adjudicación a la 2º empresa mejor valorada, la cual rechazó también la oferta “al no cumplir dicha oferta la solvencia económica requerida”. En otras palabras, que económicamente no les resultaba interesante. Por lo tanto el proceso de adjudicación ha quedado desierto.
Esta forma de subcontratar, donde la empresa adjudicataria hasta este momento ha estado aplicando a las trabajadoras del CBA convenios de otras comunidades autónomas de calidad salarial inferior, conlleva a que los sueldos propuestos oscilen entre 800 y 900€.

Ante esta injusta situación, donde trabajadoras subcontratadas comparten espacio, horario y trabajo pero no sueldo con trabajadoras municipales, queremos poner de manifiesto nuestra abierta oposición a esta arbitraria situación discriminatoria. La subcontratación está auspiciando puestos de trabajo, en instalaciones municipales, con sueldos que difícilmente llevaran a esas personas a disfrutar de  un bienestar económico digno.

Animamos al equipo de gobierno a que sea el ayuntamiento quien gestione directamente, y no a través de terceros, dichos puestos de trabajo, puestos de marcado carácter de servicio público, y que supongan condiciones laborales dignas y semejantes para todas sus trabajadoras.

Somos conscientes de las dificultades que dicha propuesta conlleva, somos conscientes de que algo tan obvio como pedir sueldos dignos y semejantes para trabajos semejantes, tiene su complicación técnica sobrevenida de leyes foráneas que tanto limitan la capacidad de actuación de las entidades locales.

Pero creemos que hay que ser valientes y dar un paso adelante en la defensa de unos puestos de trabajo dignos, cuya “dignidad” se vea reflejada a la hora de redactar las bases de licitación de los mismos.

Del mismo modo, solicitamos al equipo de gobierno no demore más la puesta en marcha consensuada de las tan necesarias clausulas sociales, las cuales evitarían en gran medida la futura repetición de situaciones similares.