Irungo Harrera Sarea.- La renovación por parte del estado francés de los controles migratorios, y especialmente en la frontera IRUN-HENDAIA, así como un cada vez mayor endurecimiento y vigilancia de los puntos de tránsito regulares está generando en las personas migrantes una ansiedad, desesperación y estrés que les aboca a intentar seguir su viaje por rutas en las que tienen que volver a arriesgar sus vidas.

Son 3 las personas fallecidas en el Bidasoa, hasta hoy.

Si al cierre cada vez más efectivo de las fronteras, únicamente para las personas negras o de supuesta procedencia norteafricana, sumamos la presión que reciben nada más entrar en el dispositivo para personas migrantes de Irun, del Ministerio del Interior y que gestiona Cruz Roja, de que únicamente podrán quedarse 3 noches, el resultado es un cóctel muy peligroso que amenaza la seguridad de las personas migrantes y les empuja a tomar decisiones de riesgo.

Por otra parte, durante las 2-3 últimas semanas el número de personas que está llegando a nuestro pueblo se ha duplicado, y ha pasado a ser de más 25-30 diarias.

Dicho esto, reclamamos-denunciamos:

• La desaparición de los controles migratorios ilegales disfrazados bajo una supuesta «seguridad nacional» que el estado francés manifiesta a la hora de renovar los controles internos en territorio Schengen.
• A nuestras instituciones, Ayuntamiento, Diputación, Gobierno Vasco, les pedimos que no se escuden en el no cumplimiento de requisitos o haber pasado 3 noches y que mientras dure este bloqueo fronterizo ninguna persona migrante se vea obligada o bien a dormir en la calle o bien a arriesgar su vida.
  
  

A pesar de las numerosas muestras de solidaridad que recibimos, tanto la Red como las personas migrantes, los recursos con los que cuenta Irungo Harrera Sarea son muy limitados y no podemos hacer mucho más.

Por el contrario, las 3 instituciones ya mencionadas, Ayuntamiento, Diputación y Gobierno Vasco cuentan con capacidad para hacer mucho más.

Es por todo esto que lanzamos esta ALERTA. No queremos más muertos en el Bidasoa. Tampoco queremos oír lamentaciones. Y no son aceptables las excusas y comentarios que por parte de las instituciones hemos escuchado en los 3 casos anteriores: «no hay derecho», «no es competencia nuestra» o «lamentamos la pérdida». Frases vacías ante medidas y criterios de acogida que no contemplan la realidad de las personas migrantes y las exponen a riesgos innecesarios.

HAGAN ALGO MAS, PUEDEN Y DEBEN HACERLO