LAB Sindikatua.- Ayer por la mañana (por el sábado) apareció otra persona fallecida en la frontera entre Irun y Hendaia. La víctima era un hombre de 40 años de Costa de Marfil. Intentaba cruzar a nado el río Bidasoa para sortear los controles policiales. Esta la séptima muerte, contabilizada, en 2021 y la cuarta en menos de un mes.

La política migratoria, la militarización de las fronteras, la vulneración del derecho humano a la libre circulación de las personas, los controles selectivos por perfil étnico-racial, las devoluciones “en caliente” y la ley de extranjería del estado español; por acción u omisión tienen responsabilidad en todo esto. No se trata de accidentes aislados, suceden demasiado frecuentemente. La frontera que se impone para dividir a Hego e Ipar Euskal Herria se ha convertido en la frontera de la muerte para las personas migrantes en transito.

Desde el sindicato LAB exigimos que las administraciones de Hego e Ipar Euskal Herria actúen de una vez evitando más víctimas en este tránsito migratorio. A diario decenas de personas cruzan esta frontera arriesgándose a algo más que a una detención. Rechazamos y denunciamos la Europa Fortaleza que mientras explota y vulnera derechos fundamentales de miles de personas trabajadoras migradas y racializadas, los abandona a la suerte en manos de una necropolítica asesina e impune.

Desde LAB, lamamos a participar en la movilización de denuncia convocada por Irun Harrera Sarea a las 12:30 hoy (domingo) y mañana lunes a las 19:00 en el puente de Santiago.

¡Hay que terminar con esta injusticia!

¡Las políticas migratorias racistas matan!

Euskal Herria, 21 de noviembre de 2021