Publicado originalmente en euskera en bidasoa.hitza.eus.
Por un día de hoy, pero el año pasado fue la primera comparecencia de la asociación Lumak Haize. Un año más ha salido a la calle, clamando que el día es también el de las txapelas de color.
Ha pasado un año desde que se fundó el grupo Lumak Haize Irungo Harrasun Kritikoa. Nació el 28 de junio de 2023 para reivindicar que el orgullo no está "en venta" y reclamar políticas para mejorar las vidas de las personas LGTBI+. Dijeron en voz alta que habían venido para parar y después de un año están haciendo un balance jugoso desde Lumak Haizea. "Hemos hecho cinefórums, perreos, Moskuko Jaiak, talleres de bisexualidad, podcasts de la Mafia Zipistina", enumera Mario Hernández.
Durante años, el Día de la Cantinera ha tomado el protagonismo principal del 28 de junio en Irun, pero, un año más, el 28 de este mes, los abanicos se agitan y los cuerpos disidentes hacen suyas las calles. "Nos vemos el 28 de junio y no el 27 de junio o el 2 de julio", ha proclamado Iker Montero. Han comenzado la exhibición de orgullo con una marcha, a las 18:30 horas. Han partido de la Asociación de Vecinos y vecinas de Santiago hacia la avenida de Iparralde. Desde allí al paseo de Colón, y por último bajarán a Mosku. «Porque los maitis, venimos de antes, saldremos a las 18:30», puntualiza Garazi La Fantasy. Un año más piden que se lleven txapelas de colores.
A su llegada a Mosku ha hecho una lectura del manifiesto, sobre las 19.30 horas. Un año más han recordado la lucha iniciada en Stonewall en 1969 y toda la "genealogía queer", ha explicado Hernández. "No olvidamos a quienes han tenido que sexiliarse desde Irun para tener una vida más libre", puntualizan desde Lumak Haizea, que precisan que quieren que su asociación sea el hogar de muchas luchas.
Un año pintando la ciudad
Piden que todas las instituciones reconozcan todas las identidades y reconozcan la lucha histórica del colectivo. El pasado año, el Ayuntamiento de Irun emitió por primera vez una declaración institucional con motivo de la vuelta del día 28, y este año, pese al cambio de alcalde, han lamentado que el consistorio sigue con "malas costumbres" y con "pasividad política". Denuncian que dentro de la programación del Ayuntamiento de Irun la fiesta de la espuma de colores es la principal y única actividad del día del orgullo. "Quieren cerrar con el blanqueo rosa la violencia que tenemos que combatir cada día", han señalado. En este sentido, han recordado y denunciado la agresión machista y transfóbica que se produjo el pasado día 18 en Irun. "El Ayuntamiento ha condenado los hechos a través de una breve nota y, una vez más, se ha quedado en las palabras", han lamentado.
Piden medidas concretas para "garantizar" los derechos de las personas del colectivo LGTBI+. Quieren que se haga un diagnóstico concreto de los casos de LGTBfobia y de las violencias estructurales que se producen en Irun. Asimismo, consideran que es hora de tener un observatorio.
La lectura del manifiesto terminó con un brindis, porque hay algo que celebrar: un año arengando. A continuación, se ha realizado una foto de familia en las escaleras de la calle Peña, siguiendo el camino iniciado el año pasado. Al anochecer, la Asociación Cultural Hazia ha ofrecido una pintxada musical a partir de las 22:30 horas.