Al tratarse de un servicio público prestado por el Ayuntamiento a través de subcontratas, los 25 trabajadores de Zainen-Clec, todas ellas mujeres, siguen luchando porque la negociación está bloqueada. Tras los 12 días de huelga realizados hasta el momento (los siete últimos en junio), reivindican un nuevo convenio. Cobran 8.000 euros menos que el personal de jardinería, manutención o polideportivo del Ayuntamiento.
Las trabajadoras del Servicio de Atención Domiciliaria de Hondarribia inician hoy una huelga de cinco días. El sindicato ELA ha convocado las huelgas para los días 12, 13, 16, 17 y 26 de septiembre, dando continuidad a las movilizaciones de siete días llevadas a cabo el pasado mes de junio. De hecho, si en junio el Ayuntamiento de Hondarribia se mostró dispuesto a ofrecer más dinero para mejorar las condiciones de la subcontrata, les trasladó la imposibilidad de sentarse en la mesa de negociación con la empresa Zaintzen-Clece y las representantes de las trabajadores.
Más de 160 hondarribiarras cuentan con un servicio imprescindible. De hecho, el Servicio de Ayuda a Domicilio lo prestan 25 trabajadoras cualificadas en Hondarribia, con el objetivo de mejorar la calidad de vida y promover la autonomía de las personas mayores o en situación de dependencia que tienen dificultades para estar en su entorno habitual. Las 25 trabajadoras son mujeres, y sólo cuatro de ellas tienen la jornada completa, el resto avanza con jornadas parciales. Dicen que no tienen un calendario fijo y que sólo cobran las horas que trabajan, pero por el tipo de trabajo tienen que estar el teléfono en el bolsillo y siempre preparados en franjas horarias muy amplias, y desplazándose de un rincón a otro del pueblo.
En cuanto a las condiciones económicas, el sindicato ELA ha denunciado que el salario de las trabajadoras de otros sectores de la localidad subcontratados por el Ayuntamiento es un 30% inferior. La retribución anual que perciben los y las empleadas a domicilio es de 8.000 euros menos que los y las jardineras, los y las trabajadoras del polideportivo o el personal de mantenimiento.
De todas formas, el conflicto laboral y las reivindicaciones de este servicio, subcontratado por el Ayuntamiento de Hondarribia, no son nuevas. Son la vieja cuenta, que también se ha repetido en épocas del anterior contrato adjudicado por el Ayuntamiento. Ya en 2017, caducaron su anterior contrato y en 2019 tuvieron que recurrir a la huelga en defensa de sus condiciones laborales. Hasta 2021 el Gobierno Municipal del EAJ-PNV (con Gotzone Larrarte como concejala de Servicios Sociales) tuvo que luchar para conseguir que el Ayuntamiento mejorara el nuevo pliego de contratos.
En medio la pandemia demostró que era un servicio imprescindible, pero que estas trabajadoras no tenían unas condiciones laborales de tamaño. En este último contrato, el Ayuntamiento aumentó de un contrato de 442.000 euros anuales a 770.000 euros con el compromiso de mejorar las condiciones de las trabajadoras. Sin embargo, el sindicato ELA ha denunciado que “los beneficios de la empresa como consecuencia de la subcontrata son una prioridad”, ya que es evidente que aquella mejora no ha repercutido en los bolsillos de las trabajadoras como se pretendía. En aquellos tiempos, el grupo municipal Abotsanitz, en la oposición, reivindicó la necesidad de municipalizar el servicio a domicilio.
Publicado originalmente en euskera en antxetamedia.eus.