Cuando la Asociación de Vecinos de Larreundi comenzó a pintar un mural recibió la "orden de parar". Y es que en el pleno municipal está aprobado que en el contencioso entre Palestina e Israel no se aceptará ningún posicionamiento en la ciudad y sólo se representará "la paz".

El pasado lunes, día 21, más de 200 ciudadanos se concentraron en la plaza San Juan para pedir el cese del genocidio palestino. Fue una concentración impulsada por la iniciativa popular Gernika Palestinarekin y en la que además de escuchar la voz de Leire Vargas, tomaron el micrófono desde la Asociación de Vecinos y Vecinas de Larreaundi.

Para hacer un "ejercicio de solidaridad" con Palestina en el barrio, el pasado 21 de septiembre se acordó contactar con los colegios del barrio y realizar un mural. La asociación vecinal, que había solicitado al Ayuntamiento, ha denunciado que, cuando el artista ya estaba dibujando en la pared, recibieron "la orden de parar".

El consistorio les comunicó que no tenían autorización para realizar el mural el 24 de septiembre "pero sin dar ninguna razón". Posteriormente, mantuvieron una reunión con el representante de Participación, pero lamentan que no encontraron salida. De hecho, les comunicaron una decisión de la corporación municipal: "No se van a alinear ni con una parte ni con otra y de hacerlo se va a reivindicar la paz". Esta decisión fue aprobada con el apoyo de PSE-EE, EAJ-PNV y PP.

Acusan al ayuntamiento de "bloquear y censurar" la iniciativa solidaria. Les añadió que las paredes de Irun "pertenecen al ayuntamiento" y que el gobierno municipal "tiene el poder de decidir qué sí y qué no dentro de sus criterios políticos". La asociación vecinal ha denunciado que este criterio político evita la solidaridad con Palestina.

No obstante, la asociación vecinal ha adelantado que se están buscando "otras vías" para realizar el mural, "la imaginación es nuestra mejor acción directa". Están convencidos de que lo harán en alguna pared que no sea la del Ayuntamiento y están dispuestos a escuchar sus propuestas. "Nosotros y nosotras no tenemos miedo a los fracasos, pero sí, además, terror y arrogancia, a la amenaza de extender la indiferencia, la indiferencia entre nuestros vecinos y vecinas", han concluido.

Publicado originalmente en euskera en bidasoa.hitza.eus.