Era de esperar que hubiera alguna reacción pública por parte del alcalde de nuestra ciudad al hecho que el Tren de Alta Velocidad ya circule directo desde Madrid a París por Barcelona. En este tema del TAV desde siempre la política de este gobierno municipal ha sido y con perdón, "culo veo culo quiero". 

El alcalde pide al lendakari "«iniciativas reales» con este tema. Iniciativas reales no sé, pero datos reales si que hay. A día de hoy se ha superado con creces el presupuesto inicial de 4.100 millones de euros, de hecho se han gastado ya en esta "iniciativa real" 4.600 millones de euros, 765.375.600.000 de las antiguas pesetas para que nos entendamos. Para este mismo año se pretende invertir 366 millones para esta "inversión real" por contra, para empleo, educación, sanidad y en la renta de garantía de ingresos se pretende recortar 370 millones. Creo que las cuentas son tan claras que hasta las que no sabemos de alta economía cogemos la idea, lo que se ahorran en los recortes se lo lleva la "iniciativa real" del TAV. Así todo aquello que no es considerado como una "inversión real" es susceptible de ser pasto de los recortes. Esto debe ser así pues no "crea nuevas oportunidades económicas para todos", como lo hace estar conectado a la mayor obra megalómana de todos los tiempos. Que pare en Irun se hace pues imprescindible para que se "creen estas oportunidades" para reflotar la burbuja inmobiliaria. 

Emociona la gran comprensión y preocupación que mantiene el señor alcalde con el señor lendakari. Tal vez, y sólo tal vez, debería mostrar más preocupación por las personas desahuciadas, las que están en desempleo, las que estando desempleadas no tiene ingreso alguno, las personas pensionistas cobrando por debajo del umbral de la pobreza, etc.. Preocupación que no parece mostrar en los últimos presupuestos. En los que para pesar del equipo de gobierno municipal no podrán incluir su tan ansiado "pequeño Manhattan" que quedaría con "la reordenación del espacio ferroviario de Irun" que es lo que verdaderamente les tienen tan apesadumbrados. Primero las obras y los edificios después las personas.

A día de hoy, ha que decirlo claro para que se entere todo el mundo, el TAV no va a conectarse por Hendaia al menos de aquí al 2032 y eso confiando en que el gobierno francés cumpla su palabra, cosa harto difícil si vemos las decenas de promesas que ha hecho a este respecto. Por no hablar que la conexión al sur con Burgos que está paralizada hasta la llegada de tiempos mejores que parece difícil que lo hagan en esta década. Lo que convierte a la llamada Y Griega Vasca en el metro más caro del mundo, con un coste que ya es de 4.600 millones de euros, como ya se ha comentado. En el caso que los dioses del capital mundial decidan que es hora de volver a la barbarie de las inversiones en infraestructuras, el trazado del TAV jamás y digo y repito, jamás, tendrá una parada en Irun y no lo dijo por mi cara bonita lo digo por las propias características de este monstruo. Lo más a lo que puede aspirar el alcalde es a una estación en el metro más caro del mundo para "volar" a Bilbo y Gasteiz. Todo lo demás son mentiras y verdades a medias llenas de intereses partidistas cuando no espurios.