24 horas para reflexionar, y 4 años ¿para qué? Es inevitable que cuando pensemos en qué es lo que pueda pasar hoy y las consecuencias que tendrá durante cuatro años, pensemos en que después de décadas pase lo que pase se van a producir cambios en este circo "electorale". Cambios que no son repentinos, si no que esperamos y deseamos sean fruto de la suma de años pasados y nuevas variables. En definitiva, desgaste del partido que ha gobernado exactamente 32 años y su fiel "oposición" y la irrupción de nuevos agentes políticos que se sumarán a la oposición y darán un aire fresco al acartonado panorama institucional de Irun.

Estos últimos tiempos se ha escrito y hablado mucho del bipartidismo. Hay que decir que en este pueblo más que bipartidismo hay que hablar de "bibloquismo". Algo que esta última legislatura se ha podido comprobar. Así durante 13 años el equipo JAS ha estado compuesto por PSE, PP y PNV, haciéndose evidente esto en las votaciones de los presupuestos o en otras muchas propuestas presentadas por este equipo de "champions". Estos grupos municipales han jugado en equipo en una misma liga, la de la especulación, los intereses económicos alejados ser las necesidades más urgentes de las personas, potenciando políticas de ladrillo y asfalto barnizándolas como las "verdaderas necesidades de la población". En definitiva una política neoliberal de manual. Algo de lo que han alardeado en esta campaña donde no han variado un ápice este discurso. Mientras durante estos años la verdadera oposición ha sido minoritaria además de estar en ocasiones amenazada de ilegalización, cosa que la historia contará cómo no se llegó a producir en Irun por carambolas de un azar alocado. Oposición que no siempre se decantó por políticas alejadas del ladrillo y en ocasiones bastante inoperante.

Sin embargo, estos últimos años la prepotencia con la que JAS ha gestionado el devenir municipal cual cortijo personal ha ido produciendo un claro desgaste que se ha manifestado en una indignación creciente en amplios sectores de la población poco dadas a "radicalismos" y que mantenía "contenta" hasta el momento. La mal llamada crisis ha visualizado que mientras todo iba bien, época de vacas gordas, y había "perras gordas" para todas era fácil gestionar desde la abundancia. Había dinerito para todo. Algo que se trastoca con la era de los recortes donde el dinero no llega para todo y hay que elegir en que gastar. La burbuja estalla y poco a poco comienza a desgastar a los y las gestoras municipales que hacen una clara apuesta donde no están las personas. El desagrado en sectores de la cultura, el euskera, el educativo, el asociativo, etc.. ha ido en aumento. Sin dinero para engrasar las cuentas de subvenciones es difícil mantener contentas a todas. La zanahoria da paso al palo de los recortes. Las papeletas dirán si este desencanto se materializa en una clara bajada de votos. Aunque si el trasvase es para los otros partidos del "bloque" las cosas para los y las irunesa no cambiarán gran cosa.

La (tienda de) campaña

Como decimos se respira cierto aire de cambio en el panorama electoral pero sin embargo, la campaña no parece a ver cambiado mucho. Aunque siempre hay anécdotas divertidas que contar en estos días de mercadeo de votos. Empezando por los lemas de campaña de algunos partidos. Curioso es el del PSE. Aunque tal vez lo primero que debamos analizar y recalcar es precisamente la ausencia de las siglas de ciertos partidos como en este caso. El PSE ha sido sustituido por Socialistas y esto último por Equipo JAS. Poco partido se ha sacado a esto. La de chanzas que podía a ver dado. Este personalismo exacerbado no sólo se da en este partido, que evidentemente se lleva la palma, sino también el los otros del "bloque". Así el PNV abrió una página Web con ele nombre de su candidato y la candidata del PP, perdón Populares, se ha convertido en esta campaña en una jovial jaranera Youtuber's. "Alardeando" de histrionismo y hazmerreír. Y es que no sólo el candidato del partido jeltzale "estaba hecho" para Irun sino que para desgracia de muchas ambos tres lo están.

Nuevos y viejos métodos de marketing

Los tiempos cambian. Y no iba a ser menos en esto de las campañas electorales. Las nuevas tecnologías parecen desplazar a las antiguas y el uso de las redes sociales se abre paso a zancadas. Sin embargo, las viejas campañas se resisten a desaparecer como el caso de los carteles electorales y la pegada, más simbólica que real. Este año la anécdota a este respecto ha estado en el cambio de las típicas marquesinas colocadas para este fin. Los viejos paneles han sido sustituidos por unos nuevos en forma de abrazo a las farolas. Lo representativo del hacer del equipo de gobierno ha sido que este cambio lo comunicaron al resto de los partidos a escasos días del comienzo de la campaña cuando ya se habían hecho los carteles. Hemos podido ver como el formato nuevo de marquesina no encajaba con el de los carteles, excepto, claro está, el del equipo JAS que encajaba como un guante. Encajaban al milímetro, ¿cómo puede ser eso? Sí, es una pregunta retorica. Fue la casualidad.

Dentro de lo nuevo ha destacado el uso de las redes sociales. El uso del Facebook y el Twitter.  El olor a cola, los caramelos, las rosas y plantas o las bicicletas-marcha han ido dejando paso a los tweet y los comunicados en los muros del Facebook. Aunque esto no nos evitado los mítines, las visitas a casa o los (des)encuentros en las aceras.

Dentro de este mundo etéreo de Internet ha sido destacable el aumento en el interés por este medio (hablamos de angulaberria.info) y por publicar diferentes opiniones que han sido seguidas por un número importante de personas. Además del esfuerzo hecho en la elaboración de un gran número de preguntas realizadas por diversos colectivos sociales o el debate en Lakaxita. Si bien hay que reconocer que la crítica al partido que ha gestionado el municipio durante 32 años ha sido lo que más éxito ha tenido. En gran parte propiciado por las aptitudes y actos de este mismo partido. Destacar la pésima traducción al euskera de una nota dejada en las casas. Lo que elevó la indignación de un gran sector de personas o la utilización en la recta final de campaña de la propia hija de JAS. Todo ello espoleado en las redes sociales. Habrá que ver si todo esto se plasma en un desgaste claro en las urnas y lo virtual tiene su plasmación en lo real o sólo se queda en eso, en mera virtualidad.

#AgurSantano

Algo novedoso y que ha transitado entre lo viejo, las pancartas, las pegatinas, etc.., y lo nuevo las propias redes sociales ha sido la campaña "Game Over. #AgurSantano" Denunciada incluso a la Junta Electoral por la colocación de pancartas el fin de semana del Sagardo Eguna y tachada de "intolerables y amenazantes". Coincidimos con el "sheriff" del equipo JAS en que hay cosas que no cambian como los intentos de criminalización de lo que se sale de sus normas. Llegando a denunciar que dichas pegatinas y carteles estaban vinculadas y firmadas por un grupo político y por tanto "hay espacio determinados para la propaganda electoral y todos tenemos que ceñirnos a ellos". La misma corta mirada de siempre y la misma reacción de gato panza arriba. No pueden entender que un grupo de personas pueda generar contestación pública y participar de la libertad de expresión en la calle que es de todas y también de las que hacen pegatinas y pancartas. Porque las normas están elaboradas para invisibilizar y así «aquello que no se ve no existe». Tal vez por ello desde la propia campaña #AgurSantano se ha denunciado intentos de censura en Facebook para el cierre de la cuenta. Una campaña nucleada en un deseo, la perdida de la alcaldía por parte del partido político que la ha sustentado durante 32 años, cosa que por otra parte, sin miedo a equivocación, es un deseo compartido por los otros siete contrincantes para los que no se pide el voto. Lo cierto es que este deseo está arraigado en un amplio sector de la población después de 32 años y entre ellos los 13 del cortijo JAS.

Veremos que nos depara dentro de unas horas esas papeletas que tanto excitan a la Democracia cuando se introducen por la rajita de la urna. Veremos si a partir de mañana crece la colmena de abejitas (como las que recorrieron el jueves pasado el pueblo) aguijoneando con su labor crítica los próximos cuatro años. Se trata de nosotras.