El miércoles 14 de octubre, a las 19’00h, tendrá lugar en Txerrimuño de Lezo una asamblea de diferentes colectivos con el fin de intercambiar información e impulsar una respuesta en común frente al Plan Territorial Parcial (PTP) de Donostialdea-Bajo Bidasoa, que se encuentra actualmente  en periodo información pública y presentación de  alegaciones hasta el 15 de noviembre. En efecto, este Plan afecta directamente a 13 municipios (el territorio que abarca que va desde Irun hasta Usurbil, Lasarte y Andoain) e incluye toda una serie de proyectos que en muchos casos han suscitado una importante oposición popular: entre otros ejemplos, cabe citar el nuevo trazado de la N-1 entre Sorabilla y Bazkardo en Andoain, la incineradora de Zubieta, el TAV, el ensanche urbanístico de Auditz-Akular, o la pasante del Metro por el Centro de Donostia. Pero además, el PTP pretende establecer en las “áreas estratégicas” que define en  Lezo-Gaintxurizketa, Altos de Zubieta, Irun y el Valle del Urumea, una planificación supramunicipal que permita la ocupación de grandes espacios para la implantación de enormes zonas de actividades logísticas, grandes equipamientos, infraestructuras e intensas transformaciones urbanísticas.

Por ello, llamamos a reunirnos entre todos los colectivos y personas que, por motivos unas veces comunes y otros propios de cada zona, estamos disconformes con el contenido del PTP. En este sentido, la iniciativa de convocar esta asamblea ha nacido de un encuentro realizado el pasado mes de septiembre en defensa de la zona rural de Gaintxurizketa, porque pensamos que es preciso reunir fuerzas y fomentar en nuestros pueblos y barrios la resistencia a estos planes de ocupación del territorio que suponen también consolidar un modelo de desarrollo cuestionado.   

NOTAS INFORMATIVAS:
El PTP es un plan de inspiración desarrollista, cuyas propuestas no solamente nos afectan en un lugar y otro, sino que suponen en su conjunto una grave agresión territorial, además profundizar en un modelo social y de desarrollo cada vez más cuestionado. Aportamos a continuación un resumen informativo de algunas de las propuestas que incluye el Plan.

Lezo-Gaintxurizketa-Oiartzun:
Uno de los epicentros del PTP se halla en la zona rural de Gaintxurizketa, donde pretende  imponer una enorme zona logística en terrenos de Lezo y Oiartzun. El PTP señala a este respecto que “sobre un área de 180 hectáreas actualmente libres se plantea la creación del principal polo de plataformas logísticas e intermodales de Gipuzkoa”.

Es preciso subrayar que, para el PTP, “las propuestas de creación de nuevas superficies para actividades económicas en Gaintxurizketa no obedecen a la necesidad de satisfacer una carencia cuantitativa”, puesto que “las reservas actualmente planificadas en el planeamiento municipal resultan suficientes”. En cambio, buscando justificar este destructivo proyecto, nos habla de que el “nuevo nodo logístico de Lezo-Gantxurizketa” sería necesario como “elemento de apoyo” a las actividades portuarias del Puerto de Pasaia y a la “transformación del centro de Irun, posibilitando la relocalización de actividades de Irun a Lezo-Gaintxurizketa”, cuando no la “posibilidad de futura deslocalización o minoración de la playa de vías de mercancías de Pasai Antxo”.

Lo cual conlleva un “incremento significativo”, hasta 420/470 Ha, del dimensionamiento de suelo para actividades económicas y logísticas a planificar en Oarsoaldea...

Asimismo, debe señalarse que el desarrollo de las plataformas logísticas de Gaintxurizketa estaría estrechamente ligada en sus comienzos a la construcción del TAV entre Astigarraga y Lezo, a la que seguiría la ejecución de una amplia red viaria, con el desdoblamiento de la Variante de Lezo-Errenteria y de los túneles de Altamira, la construcción de una vía de acceso directo desde la Autopista  A-8 (a la altura de Arkale) al Area Logística de Lezo-Gaintxurizketa y la construcción de nuevos enlaces en Lanbarren.

Irun:
Otro “núcleo duro” del PTP  lo constituye el conjunto de las operaciones que gravitan en torno a Irun.

Por un lado, cabe resaltar la propuesta de construir un nuevo enlace viario de alta capacidad y accesibilidad directa desde la Autopista al proyectado Nuevo Espacio Ferroviario de Irun-Centro, así como la “Ronda Sur” (es decir, la construcción de una nueva carretera paralela a la Autopista) junto con la ampliación de la Autopista A-8 a seis carriles entre Ventas de Irun y Behobia.

Por otra parte, propone  la implantación de nuevas plataformas logísticas y áreas de actividad económica  en el extremo oeste de los términos municipales de Irun y Hondarribia (50 Ha en Araso Norte, Zabaleta, Elbistieta).

Por último, debe destacarse aún más si cabe el tremendo impacto urbano y social de la macro-operación del Nuevo Espacio Ferroviario proyectado en Irun-Centro, donde se plantea una enorme transformación y reconversión urbanística integral de las instalaciones ferroviarias de Irun y de su entorno urbano,  con Nueva Estación de ADIF (vinculada a la llegada del TAV), Nuevas Estaciones de ETS (proyecto de Metro de Donostialdea, Nueva Estación de Autobuses, “permeabilización” del centro de Irun con nuevas conexiones urbanas, centro universitario, superficies terciarias y comerciales, etc. Este cambio radical en la fisionomía y en el uso del espacio urbano del Centro de Irun no solo abre las puertas a importantes oportunidades de negocio urbanístico, sino que acabará sin duda afectando al perfil social de la propia población.

Zubieta:
El ámbito de  los Altos de Zubieta es objeto de otra gran “operación estratégica” programada en el PTP. La instalación de “grandes equipamientos comunitarios” como la incineradora y el nuevo centro penitenciario de Gipuzkoa se conjuga en este espacio con la implantación de un vasto polígono de actividades económicas y logísticas de 72 Ha (Eskuzaitzeta). Esta intensa ocupación se completa con un “nuevo viario” entre Oria (N-1) y Txikierdi (N-634) pasando por la zona del Hipódromo y la margen izquierda del río Oria, junto con una nueva línea eléctrica de 132Kv entre Urnieta-Eskuzaitzeta y la posible construcción de 1.000 viviendas en Zubieta.   

Urumea:
El Valle del Urumea comprendido entre Donostia, Astigarraga y Hernani queda definido en el PTP como la  “Agrupación Urbana de Centro de Donostia y Urumea”, para la que apuesta por su progresiva configuración como “trama urbana de continuidad ininterrumpida” y “parte de ciudad completa en sí misma”. En consecuencia, propone un  dimensionamiento en torno a las 15.000 nuevas viviendas para el “Corredor del Urumea”, donde reconoce que aún existe un espacio de“2 Km de amplio valle relativamente desocupado”. En suma, para el PTP, “una de las transformaciones urbanísticas fundamentales que se va a producir en los próximos años radicará en la extensión del centro de la ciudad de Donostia desde Amara hasta Hernani a lo largo del Valle del Urumea”.

De ahí que pretende igualmente establecer una planificación supramunicipal en todo este ámbito, donde por otra parte también inciden fuertemente las grandes infraestructuras de transporte.  Respecto al TAV, por ejemplo, hace mención a la implantación de un “Puesto de Adelantamiento y Estacionamiento de Trenes” (PAET) “todavía no configurado” en el proyecto de la “Y vasca” y que estaría previsto situar en la margen izquierda del Urumea a la altura de Astigarraga, a la vez que aboga por un “desplazamiento de la plataforma ferroviaria en el tramo Astigarraga-Martutene-Donostia”…
 

Algunos datos acerca del crecimiento urbano, las infraestructuras, los costes económicos y la destrucción del territorio:
El crecimiento del parque de viviendas previsto en el PTP hasta el año 2030 es de 24.000 nuevas viviendas, incluidas las operaciones de Auditz-Akular (3.000 viviendas) y Antondegi (3.000 viviendas), además de Irun (entre 4.600 y 6.000 nuevas viviendas), Hondarribia (de 1.700 a 2.400)… Al tiempo, solicita “la mayoración al alza de las expectativas de crecimiento residencial de Hondarribia y Donostia Centro atendiendo a la previsible demanda específica de vivienda para segunda residencia”.

En cuanto a las infraestructuras, el PTP achaca al “periodo de fuerte estancamiento económico en los últimos años” (es decir, a “la fuerte recesión del periodo 2010-2014”) la decisión de “no considerar algunas apuestas” como el Superpuerto de Jaizkibel y la prolongación del 2º Cinturón de la Autopista por el Valle de Oiartzun y el Bidasoa que figuraban en el PTP del año 2010.

Ahora bien, el Plan considera “prioritaria” la construcción del TAV entre Astigarraga-Lezo y contempla “a medio-largo plazo” la conexión directa de la “Y Vasca” desde Oiartzun con la “futura red francesa” del TGV en Behobia; a la vez que incluye contestados proyectos como la construcción de la incineradora de Zubieta, el nuevo trazado de la N-1 entre Sorabilla y Bazkardo, la pasante del Metro por el Centro de Donostia. Asimismo, propone construir  un nuevo acceso viario al valle de Oiartzun desde el Oeste (GI-2132), la variante de Lezo de la GI-440 (al oeste del casco, por el Puerto hacia Pasai Donibane), la variante Oeste de Hernani de la GI-2132, la apertura de nuevos enlaces de la antigua Autopista A-8 en Aritzeta, Riberas de Loiola, Intxaurrondo, Auditz-Akular y Pontika-Loidi, etc.  

En el PTP se planifica la destrucción de más de 1.300 hectáreas de tierra de aquí al 2030, siendo las superficies de nueva ocupación previstas de 790 Ha para uso residencial, 340 Ha para actividades económicas, 200 Ha para redes de transporte y 100 Ha para “equipamientos comunitarios” (incineradora, nuevo centro penitenciario, etc.). Sin embargo, tratando de disimular la destrucción del territorio que comportan sus propuestas, luego nos habla de que “se minorarán los parámetros de cuantificación del parque residencial y de dimensionamiento del suelo para Actividades Económicas (…) priorizando la utilización de suelos ya artificializados y la protección del Hábitat Rural frente a la nueva expansión urbana”.

Igualmente, es significativa la estimación que aporta acerca de los costes económicos de las principales acciones programadas en el Plan, puesto que de una suma total de 3.200 millones de euros  (cifra en la que no se contabilizan las viviendas de promoción privada), 2.000 millones se derrochan en la construcción de infraestructuras de transporte (destacan el TAV y el Metro Donostialdea), a las que sigue la incineradora…

De manera que el PTP persiste en dar cobertura a agresivos proyectos de infraestructura, reproduce un conjunto de conflictos ambientales y determina un modelo territorial metropolizador y capitalista que cuestionamos.