EH Bildu Irun.- El objetivo de la nota de prensa de hoy es dar cuenta del camino carente de ética que ha recorrido el gobierno de Irun en los últimos 20 años. Inmersos en nuestras fiestas de San Pedro eta San Marcial, nos vemos en la obligación de denunciar de nuevo que las viejas costumbres no cambian.
De sobra sabemos, que este gobierno municipal no infringe de una manera clara la ley, pero y la ética? Pensamos que la tiene depositada en la balda de algún mueble viejo.
Es innegable que en estos últimos años, la actitud consciente de este equipo de gobierno, con la estimable ayuda de otros, ha favorecido a que el ambiente festivo se enrareciera y llegáramos, en ocasiones, a vivir situaciones violentas muy desagradables.
Hoy en día, el alcalde de todas y todos los irundarras, sigue haciendo esta dejación flagrante de las responsabilidades que le otorgó la ciudadanía aquel día que le hizo alcalde, ya que en estos días decide convertirse en el representante de una parte de la ciudadanía, dando la espalda a otra parte importante de ella.
Estamos cansadas de ver año tras año los esfuerzos que hace el PSE para ignorar a una parte de la población, al más puro estilo avestruz, solamente porque es lo que
políticamente más vende.
En nuestra opinión un rol penoso y lamentable, de un partido en teoría de izquierdas.
Y no hablamos por hablar, ya que son muchísimos los ejemplos que podemos utilizar para dar prueba de ello, por ejemplo:
- El apoyo presencial que le presta únicamente al alarde discriminatorio.
- El programa de fiestas municipal, el cual, por cierto, nos ha sido repartido a la ciudadanía en pack con el del alarde discriminatorio, recoge solamente fotografías del alarde discriminatorio.
- Ha vestido algunos edificios públicos únicamente con fotografías del alarde discriminatorio (La oficina de información de turismo de Luis Mariano, por ejemplo, es fiel prueba de ello)
- El respaldo que dan, sin ningún pudor, en redes sociales muchos de los y las concejalas al alarde discriminatorio en las diferentes actividades organizadas relacionadas con el alarde discriminatorio. Y en este punto, no está de más recordar que están infringiendo la ley del 18 de febrero 4/2005 que recoge que “ Las administraciones públicas vascas no podrán conceder ningún tipo de ayuda ni sus representantes podrán participar en calidad de tales en ninguna actividad cultural, incluidas las festivas, las artísticas, las deportivas y las realizadas en el ámbito de la normalización lingüística del euskera, que sea discriminatoria por razón de sexo”.
Pero, no queremos quedarnos en la mera visualización de estas actitudes interesadas, que entorpecen la cohesión social, y que tan grave nos parece, cuando son dirigidas desde la que debiera de ser la casa de todas y todos.
Y es por ello, que queremos mandar un mensaje desde la necesidad de cohesionar la ciudadanía de Irun, y a su vez subrayar que:
1- La sociedad de Irun, por fortuna, como todas las sociedades, sigue evolucionando año tras año. Y en esta evolución, estamos convencidas, de que el pueblo de Irun va a darle la vuelta a esta situación. En este camino, tenemos que agradecer a los movimientos sociales que, durante estos años, han colaborado en esta tarea con un arduo y silencioso trabajo.
2- Estamos seguras de que este conflicto podría haber tenido solución mucho antes, si el gobierno municipal, en lugar de dedicarse a obstaculizar las iniciativas de mediación propuestas, se hubiera implicado en un trabajo de mediación real.
3- De la misma manera, en este camino hacia la verdadera normalización, reafirmándonos en el objetivo de conseguir una fiesta para todas y para todos, queremos hacer un llamamiento a que la gente disfrute en comunidad, respeto y sintonía de sus días de una manera igualitaria.
4- Por todo ello, pensamos que ha llegado por fin el momento de dar pasos, y para empezar, solicitamos hoy y aquí al alcalde de todos y de todas, que reciba al alarde no discriminatorio en el balcón del consistorio.
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