Bidasoaldeko Lagunak.- Este próximo viernes, 17 de mayo, se celebra el Día Mundial del Reciclaje, declarado así por la UNESCO para que las personas tomemos consciencia de lo imprescindible que es reducir y gestionar correctamente nuestros desechos.

En la comarca de Txingudi, a la vista de los datos, tenemos poco que celebrar y mucho que mejorar.

Atendiendo a los datos oficiales de residuos de 2018, recién publicados por GHK, se observa que Txingudi es la mancomunidad de Gipuzkoa que más fracción rechazo genera: 269 kilos por habitante.

Si bien es cierto que se ha producido una ligera mejora en relación a años precedentes, tanto en el índice de reciclaje (del 48% al 51%) como en el descenso del rechazo (10 kilos menos), el ritmo de mejora se revela demasiado lento y la cantidad de rechazo generado sigue siendo enorme (21 282 toneladas), máxime teniendo en cuenta que en más de 70 pueblos de Gipuzkoa, de todos los tamaños, están reciclando en este momento el 70% de los residuos y generando menos de 100 kilos de rechazo por habitante y año.

Desde Bidasoaldeko Lagunak, instamos a iruneses y hondarribitarras, y especialmente a Txinzer y los Ayuntamientos a que pongan urgentemente medidas para reducir la producción de residuos en general, especialmente del rechazo, aumentando el reciclaje, tal como lo han hecho la mayoría de los pueblos de Gipuzkoa, gobernados por Ayuntamientos de todos los colores políticos.

Es difícil encontrar razones por las que haya en Gipuzkoa mancomunidades que producen al año y por habitante 382 kilos de residuos (reciclados y no reciclados), mientras que en Txingudi producimos 552 kilos, un 50% más. Es difícil entender que en el mismo territorio una mancomunidad con similar población produzca 85 kilos de rechazo por habitante y año, mientras en Txingudi triplicamos esa cantidad hasta 269 kilos.

Dentro de unos días, el 17 de mayo, se celebra el Día Mundial del Reciclaje. Aprovechemos la fecha para que tanto Ayuntamientos como ciudadanos/as de Txingudi pongamos el reto de llegar en 2020 a reducir el rechazo a la mitad y aumentar la tasa de reciclaje hasta el 65%. Para encontrar ejemplos de cómo hacerlo no tenemos que ir lejos; muchos pueblos de Gipuzkoa ya han dado el paso hacia la economía circular y aunque todavía les queda camino por recorrer, van en la dirección correcta y los resultados irán mejorando.

La reducción y el reciclaje de los residuos son medidas muy importantes que tenemos en nuestras manos (Ayuntamientos y ciudadanía) para hacer frente a los enormes problemas a los que se enfrenta nuestro planeta: el cambio climático y la acumulación de plásticos en las tierras, ríos y principalmente océanos. Depende también de nosotras que el Mundo que van a heredar nuestras hijas y nietos sea habitable o tenga que hacer frente a gigantescas calamidades y brutales niveles de contaminación .

Un llamamiento especial a los más jóvenes, para que asuman la conciencia de que el mundo que les va a tocar habitar y gestionar solamente va a ser posible si cambian el rumbo de los usos y costumbres que les han enseñado los adultos. Un mundo lineal de producir, comprar, usar y tirar a la basura es absolutamente inviable, ya que las materias primas son limitadas y la contaminación producida por la basura y su tratamiento lo hacen insostenible. Exigid el paso inmediato a un modelo circular en el que primen la reducción, la reutilización, el reciclaje y el compostaje.