Irungo EH Bildu.- La semana pasada se conoció que una pareja de de Irun (de 78 y 75 años respectivamente) está en riesgo de desahucio. La pareja, obligada por las circunstancias, cedió su vivienda a una entidad bancaria hace tres años, firmando un contrato de alquiler para poder seguir viviendo en ella. Ahora, la entidad bancaria ha decidido no renovar el contrato, dejando a la pareja irundarra en riesgo de desahucio. Hace unas pocas semanas, también en Irun, una mujer de 80 años fue desahuciada al no poder pagar el alquiler, y otras tantas han recibido órdenes de desahucio.

Los citados, lamentablemente, no son excepciones, no son casos aislados. En Irungo EH Bildu llevamos meses reivindicando que el derecho a una vivienda digna debe ponerse en el centro de las políticas públicas, máxime en esta época de crisis agudizada por la pandemia del coronavirus.

El Ayuntamiento de Irun ha dado a conocer que va a mediar entre la pareja en riesgo de desahucio y el banco. Desde Irungo EH Bildu vemos con buenos ojos esa labor de mediación, pero tenemos claro que el ayuntamiento no se puede limitar a eso. El Ayuntamiento debe elaborar un plan integral para hacer frente a los desahucios. Tiene que prever los casos antes de llegar a situaciones extremas y , ejerciendo todas sus competencias y realizando las gestiones oportunas ante el resto de instituciones, debe dar respuesta adecuada a los diferentes casos.

Hace mes y medio se firmó el supuesto acuerdo de gobierno progresista en Irun. Dijimos entonces que no servía para hacer políticas de izquierdas y desgraciadamente lo vivido en los últimos días lo corrobora.

El acuerdo presupuestario que alcanzamos con el gobierno municipal en el año 2020 se centraba en la vivienda. En él reivindicábamos, y ahora esa reivindicación tiene más sentido que nunca, que el ayuntamiento tenga viviendas para estos casos de desahucio y que haga una gestión real de las viviendas vacías para que nadie duerma en la calle en Irun. En EH Bildu siempre hemos tenido claro que la vivienda es la base para hacer una vida digna, y ese será nuestro principal reto.