El pasado 20 de noviembre algunas personas de oscura nostalgia recordaron los 38 años de la muerte del dictador Francisco Franco. Otras por contra recordaban que en Irun todavía podemos encontrar diversa simbología franquista. Las peticiones para su retirada definitiva han sido múltiples pero a día de hoy siguen siendo ignominiosamente visibles. 

«Pese a que al final de la década de los años 70 el Ayuntamiento de Irun cambió los nombres de 18 calles que ensalzaban a militares y organizaciones ligadas al Régimen Franquista todavía quedan en nuestra localidad varias calles que homenajean a personas que respaldaron y apoyaron el Golpe de Estado del 1936 y  la posterior dictadura fascista, y que deberían ser modificadas» así daba comienzo el comunicado de Irungo Bildu de hace unas semanas donde se pedía la retirada de la simbología franquista así como el cambio de cinco calles del pueblo. 

Ya en su día el grupo municipal de Esker Batua documentó las calles y la diferente simbología aún existente y su petición de retirada. Lo mismo que la izquierda abertzale. Esta lo ha vuelto a solicitar este mismo mes de noviembre. Estos grupos políticos y asociaciones sociales solicitan que se debata, por ejemplo, sobre las cinco calles propuestas por EH Bildu y así que se proceda de forma inmediata a la retirada en el caso de la simbología y al cambio de nombre en el caso de las calles. 

En Irun existe una Comisión de Calles donde se debaten los futuros nombres de las calles y los cambios como es este caso. En dicha comisión participan además de partidos políticos, Luis de Uranzu Taldea y el archivero municipal. Es una comisión sin poder de decisión y sin número de sesiones ni fecha fija para su convocatoria, algo que en palabras del representante de EH Bildu en el ayuntamiento puede ser un problema que haya alargado la situación. Sin embargo, apostilla, que no ha habido nunca razones para decir que no, siempre han sido buenas palabras, pero hay siguen las placas.

Hay que recordar que desde el año 2007 la ley 52/2007, conocida como la Ley de Memoria Histórica, obliga a todas las administraciones a la retirada de toda simbología franquista. Ley que por otra parte hay que recordar fue llevada al parlamento y aprobada por el propio partido del equipo de gobierno, el PSOE. 

Todavía las razones no parecen claras, tal vez sea, como indica el representante de EH Bildu, que es algo que no parece molestar a nadie y esto haga que no sea una prioridad del equipo de gobierno. Desde luego en lo que no se puede excusar es en la crisis y la falta de dinero para acometer esta tarea. En los pasados presupuestos se aprobó una partida de 40.000 euros para actuaciones relacionadas con la memoria histórica, hasta el momento únicamente se han destinado 7.000 euros a un proyecto de archivo público con material y testimonios de personas que sufrieron la guerra y la represión franquista. No parece que quitar unas placas que se puede hacer un con una escalera y un destornillador vaya a costar más de 33 mil euros. En cuanto a las cinco calles propuestas no parece que no haya candidatas y decimos candidatas pues ya grupos feministas plantearon un granado listado de mujeres candidatas a tener un hueco en nuestras calles. 

Cambio de dos placas

El la pasada semana aparecieron un par de placas con los nombres cambiados. Se habían rebautizado «las calles General Bergareche y Embajador Manuel Aznar como Aitor Zabaleta Kalea (en referencia al aficionado de la Real asesinado por ultras del Atlético de Madrid) y Martxoak III Kalea (en referencia a la muerte de cinco obreros a manos de la Policía Armada en la iglesia de San Francisco de Vitoria, el 3 de marzo de 1976)». Algo que era para la delegada del Ayuntamiento «vandalismo» pues el protocolo que se puso en marcha por parte del ayuntamiento fue según propia la delegada fue «el protocolo de actuación habitual en estos casos de vandalismo o daños al mobiliario urbano» No parece que el que la calle aún contemple el nombre de un franquista reconocido provoque al cabo de los años ningún protocolo de actuación de retirada de su nombre y sustitución por otro. Al parecer «no hay pistas o indicios sobre lo autores» como indica la ordenanza que si no nos equivocamos es la ordenanza municipal sobre comportamiento cívico y reguladora del uso, ocupación y limpieza de la vía pública del 2011, para sancionar a nadie. Sin embargo, si parece que haya pistas e indicios de que las cinco personas que tienen sus nombres en las calles de nuestra ciudad fueron franquistas declarados y que existe una Ley de Memoria Histórica que no se cumple.

Cinco calles propuestas por EH Bildu para el cambio de nombre: 

Calle Ortiz de Zarate/ Ortiz de Zarate kalea.

Joaquin Ortiz de Zarate y Lopez de Tejada (Madrid 1893- Oiartzun 1936) Hombre de confianza del General Mola, secundo a este cuando se sublevó contra la República el 19 de julio de 1936 en Pamplona. Dirijió las tropas que mas tarde tomarían Irun pero falleció el 21 de agosto tras ser herido en la toma del Monte Erlaitz.

Calle General Tellechea/ Telletxea Jenerala kalea  

Castor Tellechea Galfasoro (Irun 1896- Ourense 1953)

Ingresó en la Academia de Infantería el 24 de junio de 1915. Sirvió en el Regimiento de Garellano, n.° 43 y en el Ejército de África de 1916 a 1921. Ascendió a capitán por antigüedad, siendo destinado al Regimiento de Infantería de Valladolid. En 1922 volvió al Ejército de África, donde estuvo los años 1923 y 1924. Durante la guerra civil se integró como comandante en el Tercio de requetes de Montejurra y participó en la campaña del norte que llevaron a las tropas franquistas a tomar Bilbao, Santander y Asturias. En 1952 fue ascendido a general de brigada de Infantería y Jefe de la División n.° 81, cuya jefatura llevaba anexo el cargo de Gobernador Militar de Orense. 

Calle General Bergareche/ Bergaretxe  Jenerala kalea. (Barrio de Dunboa)

Francisco Bergareche Martitorena (Irun 1896 – Barcelona 1964)

General de artilleria del ejercito español que se unió a la sublevación contra la República en Figueres el 19 de julio de 1936.  Muy afín al régimen franquista , desempeñó diversos cargos durante la dictadura dentro de la Capitanía de la IV Región Militar: General de Brigada, Jefe de artilleria de la VI región, Jefe de sudinspección de tropas, presidente del Centro cultural de los ejercitos, Subgobernador y Gobernador militar de Barcelona.

Calle Mourlane Mitxelena/ Mourlane Mitxelena kalea.

Pedro Mourlane Michelena (Irun 1885- Madrid 1955) periodista y escritor falangista que inicia su carrera en Bilbao donde pronto entra en contacto con los círculos de derecha reaccionaria y antirrepublicana bilbaina, próximos a “Acción Española”. En 1931 se traslada a Madrid donde abrazará fervientemente el falangismo. Cercano a Jose Antonio Primo de Rivera muchos le consideran el primer escritor fascista español, influyendo, desde su ideología falangista, en el discurso político de su tiempo. Germanófilo, fue un ferviente defensor de la Alemania de Hitler en muchos de sus artículos. En 1935 junto a otros escritores falangistas participará en la redacción de la letra del “ Cara al sol” futuro himno de Falange. Tras la guerra y muy cercano al régimen de Franco dirigió  el periodico «Arriba» cabeza visible de la llamada prensa del Movimiento. Fue vocal y vicepresidente de la Asociación de Prensa de Madrid y recibió además diversas distinciones y condecoraciones franquistas. 

Calle Manuel Aznar/ Manuel Aznar kalea.

Manuel Aznar Zubigaray ( Etxalar 1894/ Madrid 1975)

Periodista, publicista y diplomático que tras un viraje ideológico abrazo entusiastamente el franquismo. En 1939 recibió el premio “Francisco Franco” con quien mantenía una gran amistad y tras la Guerra  Civil se dedicó a escribir sobre las virtudes de las tropas fascistas en esta: “Guerra y victoria de España, 1936-1939”, “El Alcázar no se rinde” , volumenes 28 a 36 de “Historia de la Cruzada”,  etc.

Desempeño distintos cargos diplomáticos durante el franquismo: Ministro plenipotenciario en la embajada de Washington (1945), Embajador en la República Dominicana, representante de España en la ONU (1957-1958), Embajador en Marruecos, representante de España en la ONU (1964-1968)…

Fue director de la agencia EFE (1958) y recibió la Gran Cruz del Mérito Militar y la Orden de Carlos III.