A partir de diciembre, la policía francesa sólo realiza controles puntuales en los puentes de Santiago y Pausu. Y a pesar de que la frontera se transforma, Irungo Harrera Sarea denuncia que son “igualmente controladas y desplazadas”.
Antxeta Irratia.- Este 8 de noviembre 50 personas migrantes se han dado cita en la plaza San Juan a las 7 de la mañana. Querían cruzar la frontera y, cogiendo taxis, «Quién sabe por dónde lo han intentado», dice preocupado Antxon, de la Red de Acogida. Los voluntarios de la Red de Acogida han perdido su pista.
En Irungo Harrera Sarea venimos observando hace algunas semanas el incremento de controles de policía de fronteras en Irun. Esto hasta ahora no era habitual. Hemos sido testigxs de controles y detenciones de personas extranjeras. Realizando nuestra labor diaria, hemos coincidido con policías esperando a la llegada de autobuses y que pedían documentación únicamente a las personas negras. Es decir, controles por fenotipo, ergo, racistas. Detenciones en que la persona quedaba en libertad a las horas, como hemos comprobado.
SOS Racismo Gipuzko y la Red Ciudadana de Acogida denuncian que compañías con destinos internacionales están realizando controles racistas en la estación de autobuses de Donostia, algo que es ilegal según una sentencia europea.
Una empresa de autocares de línea que atraviese una frontera interior Schengen no puede controlar el pasaporte o el permiso de residencia de los pasajeros antes de cruzar la frontera interior, con la excusa de prevenir el transporte de personas en situación administrativa irregular